Sin duda, tanto los dentistas como los ortodoncistas son especialistas en mejorar a los pacientes su salud bucodental, pero, aunque pueda parecer lo contrario, lo hacen de forma muy diferente. Normalmente, a ambos especialistas los solemos denominar como dentistas, pero vamos a intentar dar luz y aprender a diferenciarlos para poder elegir una según las necesidades que tengamos.
Comúnmente llamamos dentistas a los odontólogos. Los odontólogos son la especialidad médica que estudia y trata tanto a los dientes, como a las encías, como a los huesos que hacen que tanto diente como encías estén sustentadas.
Sin embargo, un ortodoncista es el especialista dentro de los odontólogos. Esta especialidad está orientada para corregir oclusiones, posiciones dentales inapropiadas o corregir la mordida.
Tanto ortodoncistas como odontólogos realizan estudian lo mismo inicialmente, pero en este caso los ortodoncistas se especializan en esta materia de forma adicional después de terminar odontología. Es por decirlo de alguna manera, similar al MIR si habláramos de medicina. Es por esto que un ortodoncista, antes de ser ortodoncista es odontólogo o estomatólogo.
Si hablamos de las funciones del dentista, debemos de señalar que se van a ocupar de cuidar la salud bucal en general del paciente. El dentista va a tratar de detectar, prevenir y tratar caries, cualquier tipo de enfermedad de las encías, problemas de higiene bucodental, o bien extraer las piezas que vean que no tienen cura. Los dentistas mejoran la apariencia y función de los dientes, ya sea con carillas, como con coronas en los dientes astillados, deformados o con dientes rotos. También dentro de su competencia está la de rehabilitar la falta de alguna pieza dental o de varias mediante puentes, implantes o prótesis removibles. El odontólogo una vez revisa la boca y ve las necesidades o carencia, aconseja y ayuda a mejorar la salud bucal. En resumen, el dentista revisa la cavidad oral, los dientes y las encías y deriva a otro especialista si es necesario.
Por otro lado, los ortodoncistas, son especialistas en corregir la mordida, mejorar la alineación de los dientes mediante dispositivos correctivos y aparatos, entre los que se podemos encontrar los aparatos linguales, los ortodóncicos tradicionales o los aparatos transparentes, muy de moda últimamente.
En este caso el trato del ortodoncista dura el tiempo que dura la ortodoncia, mientras que con el odontólogo es una relación para toda la vida. Es más, lo aconsejable es visitar con frecuencia a nuestro dentista para que nos revise y examine nuestra cavidad bucal para en el caso de que tengamos algún problema, lo podamos atajar a la menor brevedad posible.
Será el dentista el que nos mande acudir a un ortodoncista si lo ve necesario, y será este último profesional el que le aconsejara los mejores tratamientos dentales para su problema, o el tipo de ortodoncia que debe llevar.
Una mordedura deficiente, puede desencadenar en muchos problemas en nuestra boca, desde una mala masticación que genera una mala digestión, a tener problemas en la mandíbula o producir problemas incluso en el habla.
Por eso es importante acudir al dentista al menos una vez al año, aunque es mejor hacernos revisión cada 6 meses.